Sabía
Sabía que nunca pararía de correr, de viajar, de comer, de disfrutar, de ser feliz.
Sabía que corría el riesgo de no poder parar de viajar, de comer, de disfrutar, de ser feliz.
Sabía que algún día dejaría de viajar, de comer, de disfrutar...
Pero nunca dejaría de ser feliz, o al menos de intentarlo. Esa era la vida misma.
Comentarios
Publicar un comentario